La provincia se encuentra en jaque. Si por el sur la sequía endémica que sufrimos durante décadas y que se ha vuelto insostenible desde que en mayo nos cerrasen el trasvase Tajo-Segura, tiene en vilo a miles agricultores, que pueden perder 35.000 hectáreas de cítricos y hortalizas, por el norte, la plaga de la Xylella Fastidiosa, bacteria que está afectando a la variedad del almendro, hace que este cultivo de secano haya entrado en peligro de extinción en las comarcas de La Marina Alta, Marina Baixa y El Comtat, donde se han detectado, hasta el momento, 4 focos, con 86 parcelas afectadas y 106 positivos.

 

Ante lo insostenible de la situación por ambos costados de la provincia, no es de extrañar la oleada de protestas que están germinando y que ya tienen fecha de celebración para las próximas semanas. Movilizaciones con distintas reivindicaciones, pero con un mismo fondo, pedir a los políticos que reaccionen, que escuchen a los afectados y que pongan en marcha medidas eficaces para solucionar unos problemas que están haciendo que nuestro sector agroalimentario se tambalee, estando en juego mercados europeos y mundiales, a los que van a parar el 80% de nuestra producción y que nos han costado más de 30 años conseguir. 

Por un lado, el Círculo por el Agua, integrado por el Foro Pro Agua de Alicante, la Mesa del Agua de la Región de Murcia y la Mesa del Agua de Almería, ha convocado tres manifestaciones para exigir al Gobierno soluciones de urgencia ante el destrozo agrícola y el descalabro económico que el déficit hídrico puede provocar de forma inminente. Las fechas son el 13 de diciembre, en Murcia; el 19 de diciembre, en Torrevieja; y el 15 de enero, en Madrid.

Por otro lado, ASAJA Alicante y la asociación de afectados por la Xylella en Alicante han convocado una manifestación el 16 de diciembre, en Guadalest. Y es que, la amenaza que penetra por el norte de la provincia no es menos baladí. La plaga de la Xylella Fastidiosa sigue avanzando y el rumor de un quinto foco cada día cobra más fuerza entre los agricultores y vecinos de la zona. La Administración valenciana, lejos de escuchar a los afectados, sigue adelante con su plan de erradicación masiva, arrasando la parcela afectada, con árboles enfermos y, también, sanos, más cien metros a la redonda. Ya se han exterminado alrededor de 500 almendros solo en el 1er foco y están pendientes de arranque 250 hectáreas del 2º, 3º y 4º foco.

Nos piden que Alicante se sacrifique, que arrase toda la producción de almendros de secano, cultivo que paisajísticamente es clave y un elemento económico y fijador de población de primer orden, ya que muchos de los que viven es esos pueblos son productores de almendra, a cambio de nada. Quieren que trituremos los pulmones verdes de nuestra provincia para que la plaga no llegue a Valencia, Castilla la Mancha y al resto de España, ofreciéndonos unas indemnizaciones irrisorias que, inexplicablemente, ni siquiera contemplan el lucro cesante.

Señores lectores, sepan que somos los únicos en el mundo que estamos aplicando un plan de erradicación masiva. De hecho, en otros países donde la Xylella lleva instalada años y décadas, como Estados Unidos, Brasil, Italia y Francia, han aprendido a convivir con ella con contención, investigación y replantación de variedades resistentes y ni se les pasa por la cabeza deforestar sus bosques y medio ecológico.

El ADN de ASAJA Alicante viene marcado por la defensa del agricultor, del territorio y por mantener una postura de alerta y ser vigilante ante el papel que desarrolla la Administración en temas que afectan al sector. Tanto en la crisis del agua como en el de la Xylella, el papel del Gobierno valenciano ha sido un disparate, con actuaciones desproporcionadas, falta de información a los afectados, de trasparencia, opacidad, prepotencia... De hecho, a día de hoy, la titular de Agricultura en la Comunitat, Elena Cebrián, aún no se ha personado en la “zona cero” de la Xylella. Imperdonable.

Llegados a este punto y ante la situación de emergencia que vive la provincia, amenazada de norte a sur e impregnada por una desidia y dejadez política que yo jamás he conocido, quiero pedir encarecidamente la participación de todos los ciudadanos, tanto en las manifestaciones organizadas por el agua, el 13 y 19 de noviembre (Murcia y Torrevieja) y 15 de enero (Madrid), como en la protesta por la Xylella, el 16 de diciembre, a las 11 horas, en Guadalest. No podemos dejar que destruyan nuestra provincia. El problema del agua y de la Xylella no es solo de los agricultores, nos afecta a todos: ganaderos, apicultores, comerciantes, vecinos, familias, turistas… ¡contamos con vosotros!