El Colegio de Comisarios de la UE ha ratificado la propuesta de la propia Comisión Europea (CE) de imponer aranceles al arroz durante tres años a los países de Camboya y Birmania. La decisión se publicará hoy día 17 de diciembre en el Diario Oficial de la UE.




 La investigación realizada por la CE que apuntaba a un aumento significativo de las importaciones de arroz índica ha causado daños económicos a los productores europeos. Es por ese motivo que desde hoy la UE restablecerá el derecho de aduana normal –dentro del Sistema de Preferencias Generalizadas (SPG)– para este producto de 175 €/tonelada, durante solo el primer año, reduciéndolo progresivamente a 150 €/tonelada en el segundo y 125 €/tonelada en el tercero.

Hay que recordar que la solicitud inicial de la cláusula de salvaguarda sobre las importaciones de arroz fue presentada por el gobierno italiano en febrero de 2018 y con el apoyo de todos los demás EEMM productores de arroz de la UE (España, Francia, Portugal, Grecia, Hungría, Rumania y Bulgaria) que propició que la CE abriera una investigación formal el 16 de marzo de 2018. Tras no conseguir mayoría cualificada en el Consejo entre los EEMM para aprobar los aranceles durante el año pasado, la CE ha sido la encargada de tomar la decisión final. 

Aumento de las importaciones de un 89 %

Durante la investigación, la Comisión constató que las importaciones de arroz índica de ambos países habían aumentado un 89 % en las últimas cinco campañas arroceras. Además, durante la misma se constató que los precios eran sustancialmente más bajos que los del mercado de la UE y que habían disminuido durante ese mismo período. Este aumento de las importaciones a bajo precio, dice el estudio, habría causado graves dificultades a los productores de arroz de la UE, hasta el punto de que su cuota de mercado en la UE se redujo sustancialmente del 61 al 29 %.

Por tanto a estos dos países que hasta ahora se beneficiaban del acuerdo EBA (todo salvo armas) con la UE, que concede unilateralmente un acceso libre de derechos y de cuotas a los países menos desarrollados del mundo, se les impondrán el arancel tipo que está estipulado por la UE. 

Reacciones

El Copa-Cogeca ha acogido de manera muy positiva la decisión del Colegio de Comisarios puesto que, para ellos, han enviado una señal positiva a todos los productores europeos de arroz: la intención de reintroducir los aranceles sobre las importaciones de arroz de Camboya y Myanmar durante los próximos tres años.

El lobby agrario europeo ha afirmado además que esta decisión pone fin a una situación que se ha vuelto insostenible para los productores europeos tras la aplicación del acuerdo comercial desde 2001.

Giuseppe Ferraris, Presidente del Grupo de Trabajo sobre Arroz ha agradecido a los representantes de la Comisión por el esfuerzo y el trabajo que han realizado para alcanzar este objetivo positivo 

Asimismo el Secretario General del Copa-Cogeca ha afirmado que el cultivo de arroz es vital para prevenir el éxodo rural y proporciona muchos beneficios ambientales. “Seguiremos defendiendo nuestras tradiciones y nuestro patrimonio impulsando el número de campañas de promoción del arroz de la UE y reiterando nuestro llamamiento a favor del etiquetado obligatorio de origen del arroz a escala de la UE", ha concluido. 

Cabe destacar que esta es la primera vez que se activa este mecanismo de cláusula de salvaguardia en relación con países que forman parte del Acuerdo “Todo Menos Armas”, motivado por un incremento desproporcionado de las importaciones en la UE y a precios que hacen inviable la producción en la UE, sometida a controles y condiciones de producción mucho más exigentes que las que se dan en países terceros.

ASAJA ha participado muy activamente en esta acción coordinada por los países europeos productores de arroz ante sus gobiernos respectivos para lograr activar esta cláusula de salvaguardia y ante las instituciones comunitarias, a través del COPA-COGECA, con el vicepresidente del Grupo de Trabajo de Arroz, Miguel Minguet, miembro de ASAJA que ha participado en numerosos encuentros, tanto ante la Comisión, como con miembros del Parlamento Europeo y del Consejo de Ministros.