El primer presupuesto del nuevo Gobierno resitúa el foco de las políticas públicas en los agricultores y ganaderos, los principales actores del medio rural De ejecutarse tal y como se ha planteado, puede suponer un importante revulsivo

 

El incremento del presupuesto de la Consejería de Agricultura en casi un 17% supone un buen punto de partida para desarrollar una política agraria andaluza que evite la pérdida de fondos europeos y complemente, con medidas reales, el respaldo que ofrece la Política Agraria Común (PAC) a los agricultores y ganaderos andaluces.

 

Tras el análisis detallado del presupuesto de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Sostenibilidad para el ejercicio 2019, ASAJA-Andalucía se congratula no sólo del notable incremento presupuestario, sino también y muy especialmente, del cambio de filosofía en la gestión de estos fondos, puesto que como ASAJA-Andalucía venía demandando en los últimos años, comienza a contenerse el gasto corriente -reduce su presupuesto un 3,51%- y se priorizan las políticas activas, que son las que tienen capacidad de generar empleo y riqueza en la Andalucía rural.

 

El director general de ASAJA-Andalucía, Félix García de Leyaristy, ha ofrecido hoy en su comparecencia ante la Comisión de Hacienda, Industria y Energía del Parlamento de Andalucía el voto de confianza de ASAJA y del sector agrario a unos presupuestos que, “si se ejecutan tal y como se han planteado, pueden suponer un importante revulsivo para dinamizar el sector agrario”.

 

Las líneas presupuestarias de las políticas agrarias y medioambientales contarán con 243,3 millones de euros más que en 2018, un incremento presupuestario del 16,89% que ASAJA espera que permita modernizar las explotaciones, incorporar a más jóvenes a la actividad agraria y relanzar el Plan Estratégico Agroindustrial de Andalucía Horizonte 2020.

 

La modernización de explotaciones y la incorporación de jóvenes, dos de las principales líneas contempladas en el capítulo presupuestario 7.1.B (Ordenación y mejora de la producción agrícola y ganadera), cuentan con un presupuesto de 108 millones y 72,1 millones de euros, respectivamente. Este capítulo con el que también se financia el sistema de seguros agrarios, la sanidad animal y vegetal y el arreglo de caminos rurales, entre otros, cuenta con un presupuesto de 303 millones de euros y sube el 86,5 % respecto al pasado ejercicio.  

 

El presupuesto de 2019 refuerza también su apoyo a la industria agroalimentaria. El capítulo 7.1.E (incentivación del sector agroindustrial) dobla el presupuesto que se le asignó en el ejercicio anterior, lo que debería permitir el relanzamiento del Plan Estratégico para la Agroindustria de Andalucía Horizonte 2020, fundamental para mejorar la competitividad del sector y para incorporar las nuevas tecnologías al proceso de producción y comercialización de nuestros productos.

 

Este presupuesto de 2019 supone un cambio radical con respecto a lo que el Gobierno anterior venía planteando y supera el examen al que le ha sometido ASAJA-Andalucía, pese a ello, tal como ha comentado en su comparecencia Félix García de Leyaristy, “hay dos aspectos que preocupan: el retraso en la ejecución de la medida 19.2, a cargo de los Grupos de Desarrollo Rural, y la situación de las ayudas a los espacios forestales de titularidad privada (74% de los montes andaluces)”.

 

Respecto al primer asunto, resulta preocupante que en el quinto año del marco de ejecución del Plan de Desarrollo Rural de Andalucía (PDR-A) los Grupos de Desarrollo Rural se encuentren aún en el 0% de ejecución presupuestaria de su estrategia de desarrollo local (el dinero destinado a los emprendedores y a las entidades beneficiarias), dado que sólo han justificado ante la Junta de Andalucía sus gastos de funcionamiento interno, lo que se traduce en que hasta la fecha no ha llegado ni un euro a los beneficiarios. 

 

Respecto al segundo asunto, el de las ayudas forestales, pese a que están incluidas en el PDR-A 2014-2020, hasta la fecha se ha ejecutado menos del 5% de todas las ayudas programadas, y parece que la mayor parte de estas medidas tampoco se van a ejecutar en 2019.

 

Con carácter general, el análisis del presupuesto por parte de ASAJA-Andalucía concluye que la Consejería de Agricultura gana peso en el conjunto del presupuesto de la Junta. Se trata de un proyecto que cumple gran parte de las demandas del sector y recoge muchas de las reivindicaciones planteadas por ASAJA a los anteriores ejecutivos, puesto que contiene el gasto corriente, prioriza las medidas de inversión y apoyo a las empresas y resitúa el foco de las políticas públicas en los agricultores y ganaderos, los principales actores del medio rural.