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La organización pide a la Consejería una reunión urgente para analizar la situación y planificar actuaciones que permitan el control de la plaga

Ante la proliferación de topillos en la provincia, principalmente en las zonas ZEPA (Zonas de Especial Protección para las Aves) de La Nava-Campos y Camino de Santiago, Asaja Palencia ha solicitado una reunión urgente con la Consejería de Agricultura y Ganadería para planificar actuaciones que permitan el control de una plaga que supone una grave amenaza no sólo a la producción agrícola, y sino también a la salubridad de las zonas rurales.

Los agricultores de municipios enmarcados en estas zonas y próximos a ellas ven cómo los focos de topillos se van incrementando, de forma que se observan ya importantes daños en cultivos como la alfalfa y el girasol -los que están en el campo- ya que la sequía ha camuflado los daños que ahora afloran en las parcelas ya cosechadas.

La alarma de los agricultores va en aumento ante el temor de otra nueva plaga incontrolable. “Llevamos varias campañas con superpoblación de topillos. El pasado mes de diciembre ya se declaró oficialmente la última plaga. Un problema que parecía ser cíclico, ahora se está haciendo crónico”, lamenta Honorato Meneses, presidente de Asaja Palencia.

Durante la reunión se van a pedir soluciones urgentes y efectivas a un problema que involucra a distintas administraciones. Así, se les invitará a sus responsables a visitar las zonas afectadas para comprobar la magnitud del problema, y se les ofrecerá la colaboración de Asaja para participar en el estudio de posibles soluciones. “Se trata de un problema que nos afecta a todos los que de una u otra forma estamos relacionados con el medio rural, no solo a los agricultores. La proliferación de roedores hace que hasta dar un simple paseo se convierta en una actividad desagradable”, puntualiza Meneses.