En la zona pirenaica los jabalíes han provocado cuantiosos destrozos en campos sembrados de forraje para el ganado.

 

La elevada presión que causa la fauna salvaje sobre los campos de cultivo de nuestra provincia se ha visto incrementada en esta última semana con motivo del fuerte temporal de nieve que hemos sufrido.

La imposibilidad de encontrar alimento en el monte ha empujado a estos animales, fundamentalmente jabalíes, a buscarlo en los campos de cultivo, con el consiguiente daño para los mismos. Este daño no es debido solamente al forraje que consumen si no a los destrozos que causan en el terreno para su obtención.

Los surcos que abren en el terreno con el hocico para obtener el alimento dificultan las labores de siega del forraje en la primavera y verano, llegando en los casos más graves a no poder segar estas parcelas, generando una pérdida económica al ganadero. En otras parcelas se ha comprobado como los jabalíes han comido directamente las semillas de forrajes que los ganaderos sembraron antes de la llegada del temporal.

Por su parte las grandes manadas de corzos y ciervos, si bien no causan los destrozos que hacen los jabalíes, sí que pueden llegar a acabar con parcelas enteras de pradera o cultivos, debido a su elevado número y a los muchos días que acuden a comer. En estos casos los cupos existentes para su caza impiden un control eficaz de estos animales.

Desde Asaja Huesca denunciamos una vez más los elevados daños que la fauna salvaje (corzos, ciervos, jabalíes y conejos) causan en los cultivos de la provincia de Huesca, que en algunas zonas han obligado a los agricultores a abandonar determinados cultivos o a vallar sus parcelas para impedir la entrada de estos animales, con el elevado coste que esto supone.

Exigimos que se tomen medidas para evitar estos daños, y que no pasen por reducidas compensaciones económicas que no sirven más que para enfrentar a agricultores y cazadores. La ampliación de los periodos de caza y el control de la natalidad de estas poblaciones de fauna salvaje deben ser contempladas como instrumentos para disminuir el censo de estos animales, pues de continuar esta situación se producirá el abandono de la actividad agrícola en zonas de alto valor medioambiental.