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La Comunidad de Regantes Caz de Jotayar de Atarfe y la Junta Central de Usuarios del río Cubillas de Pinos Puente interpusieron el pasado 23 de marzo demanda de juicio verbal para la suspensión de obra nueva en el tramo Pinos Puente-Atarfe contra la constructora OHL-UCOP, y contra la asesoría técnica del Ministerio de Fomento, INTEMAC S.L., siendo admitida a trámite por el Juzgado de Primera Instancia nº 18 de Granada.

Tras nueve años de conflictos desde que se iniciaran las obras de la GR-43 y dos años de frustradas negociaciones con la Dirección de Obra del Ministerio de Fomento para consensuar la reposición tramo por tramo de las acequias dañadas, la Comunidad de Regantes Caz de Jotayar de Atarfe y la Junta Central de Usuarios del río Cubillas de Pinos Puente presentaron finalmente una demanda de juicio verbal contra la UTE OHL-UCOP y la asesoría técnica del Ministerio INTEMAC S.L para la suspensión de obra nueva en el tramo Pinos Puente-Atarfe, siendo admitida a trámite por el Juzgado de Primera Instancia nº 18 de Granada, que ha emplazado a la parte demandada para que se pronuncie sobre la pertinencia de celebrar vista en el plazo de diez días hábiles.  

Los regantes solicitaron en su demanda, en concreto, la paralización de 40 obras a lo largo de 5,5 kilómetros, 24 acequias y 16 obras de drenaje transversal con el fin de corregir las malas actuaciones de la constructora: diferencias de cotas, caudales a contracorriente, tuberías atoradas, etc.,  que están causando no solo perjuicios económicos a los agricultores por no poder regar sus cultivos, más de 858.000 euros de pérdidas por campaña, sino daños patrimoniales en la red de acequias tradicionales de la Vega y al ecosistema natural.  Las obras podrán ser en breve plazo suspendidas cautelarmente, por orden del juez, hasta que se dictamine la resolución del juicio mediante sentencia.  

Desde ASAJA GRANADA defendemos la Vega como paisaje natural y agrario en equilibrio y el papel de los agricultores en su mantenimiento desde hace siglos, y, por eso, creemos necesaria la compatibilidad de las obras de la autovía con las reivindicaciones de los regantes.  Está en juego el modo de vida de cientos de familias y la pervivencia de la Vega.