Thumb
Asaga Canarias Asaja “Combatir la situación de sequía del sector agrario pasa por que los municipios turísticos consuman más agua desalada”

 

También están previstas otras actuaciones para aumentar las capacidades de

embalses y galerías de la zona.

      

            El consumo de más agua desalada proveniente de la desaladora de Fonsalía (Guía de Isora) por parte de los municipios turísticos (Santiago del Teide, Guía de Isora, Adeje y Arona) se plantea como una de las posibles soluciones que han puesto sobre la mesa el Cabildo Insular de Tenerife, la Asociación de Agricultores y Ganaderos de Canarias (ASAGA Canarias ASAJA) y los ayuntamientos de Vilaflor y San Miguel, tras el segundo encuentro que han mantenido en la Cooperativa de Casmi, para intentar  corregir la “complicada” situación de sequía que padecen en la actualidad las medianías y zonas altas de estos dos municipios. Un problema que amenaza con arruinar las cosechas ante la imposibilidad de sembrar en estos momentos y la dificultad de disponer de agua de riego de cara al periodo estival.  

            Para Ángela Delgado, presidenta de ASAGA Canarias ASAJA, “con el uso de agua desalada por parte del turismo nos aseguramos de disponer de agua de muy buena calidad y en cantidad suficiente para la población pero además permite liberar agua de pozos y galerías para destinarla al sector agrario”.

            Además de la desalación, otra de las actuaciones previstas contempla la posibilidad de incrementar la capacidad de conducción desde el depósito de Las Charquetas hasta el embalse de Lomo del Balo (ambos en Guía de Isora) que pasará de los 2.200 hasta los 9.000 metros cúbicos al día. De esta cantidad, un 60 % se podrá destinar a la agricultura.

            En el caso concreto de Vilaflor, además del agua que llega procedente de la galería de Tágara, se incorporarán aguas provenientes de las galerías de La Canal y Niágara, ambas situadas en la parte alta de Adeje y Guía de Isora, respectivamente. De esta forma, el municipio dispondrá de más agua tanto para la agricultura como para abasto. A esto se suma, las obras realizadas en el municipio para reducir en más de un 20 % las pérdidas en las redes de distribución así como los trabajos de limpieza y perforación en la galería de Pinalito.

            También se abordarán medidas de intercambio de agua con los agricultores de tal manera que comiencen a utilizar agua procedente de la desaladora de Fonsalía a cambio de liberar agua de la galería de Niágara para que quede disponible este recurso en las zonas altas, especialmente en el municipio de Vilaflor.

            Cabe recordar que en diciembre se celebró una primera reunión a petición de ASAGA para abordar la escasez de agua en la comarca en la que Delgado pidió que “en ningún caso” las medidas que se aprobaran supusieran un sobrecoste para el agricultor “que bastante tiene con los perjuicios causados por la pérdida de rentabilidad”.